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Antonio de Jesús López Monje volvió este lunes al Hospital Juárez de la Ciudad de México, donde está prevista una revisión neurológica y una nueva operación, la cual definirá si volverá a recuperar su movilidad o tendrá secuelas de por vida.
A un mes de la golpiza que le dieron sus compañeros de la escuela secundaria Galileo Galilei, en Puebla, la cual le produjo traumatismo craneoencefálico severo, una operación en el cerebro, caer en estado de coma y estar con parálisis en la mitad de su cuerpo, el niño de 12 años de edad fue trasladado en la madrugada por una ambulancia de la Secretaría de Salud al centro hospitalario de la capital del país.
María de Jesús Monje Tapia, madre del infante, explicó que el futuro del menor de edad depende del desarrollo de su última operación, la cual será evaluada por el neurocirujano pediátrico Alberto de Montesinos.
Como lo ha hecho en el pasado, la mujer que se considera madre y padre externó su agradecimiento al personal médico y de enfermeras de ese nosocomio y, en contraste, lamentó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) en esta entidad no haya proporcionado ningún apoyo, pese a la exposición mediática del caso.
Entrevistada en la casa 24 de la Segunda Cerrada del fraccionamiento San Andrés, la mujer admitió que todavía no ha logrado promover la denuncia penal ante la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Puebla, pues por ahora está ocupada en la salud de su hijo.
