Conmemoran 19 de septiembre en Jojutla

Con una cadena humana, un minuto de silencio, aplausos y entonando el Himno Nacional Mexicano, decenas de familias damnificadas conmemoraron el sismo del 19 de septiembre.

“No hay otra forma de dar gracias, toda le gente que se unió a la ayuda, no hay otra forma más que salir y a la hora que fue el sismo, a la hora que fue el terremoto que fue a las 13 horas con 14 minutos, así como salirnos para cubrirnos de que no nos cayera nada encima, de eso se trataba, de salir levantar las manos y decir gracias a toda la gente que apoyó y que a la fecha sigue apoyando”, dijo Alfredo Avilés Alcaraz.

Los damnificados de la Colonia Emiliano Zapata, una de las zonas más dañadas por el sismo, se reunieron en torno a una ofrenda de flores y veladoras montada en memoria de los muertos que dejó el terremoto en esta zona.

Los vecinos, que desde hace un par de semanas viven en carpas y refugios temporales de plástico, formaron una fila a lo largo de las calles de la Colonia, se tomaron de las manos y en punto de las 13:14 horas hicieron sonar una campana.

Durante algunos segundos cerraron los ojos y recordaron los momentos que vivieron la trágica tarde del 19 de septiembre.

Algunas de las personas lloraron, otras gritaron, muchas se abrazaron y buscaron consuelo entre familiares y amigos.

También guardaron un minuto de silencio en memoria de las víctimas y finalmente cantaron el Himno Nacional para agradecer la ayuda que ha llegado desde el día del sismo la fecha a Jojutla y a los cientos de voluntarios que han llegado de todo el País y del mundo.
 
“Jojutla fue muy devastada sí se dan cuenta, por lo tanto se sumaron los estados, se sumó el norte se sumaron incluso del extranjero, nosotros lo único que nos queda no tenemos mucho que dar, pero mucho que agradecer por lo tanto creo que es muy importante decirle al mundo entero gracias, gracias a México, gracias a los que nos han ayudado”, expresó Cecilio Ovando.
 
Aleída Romero Sánchez perdió a su hija de dos años y su madre que fallecieron bajo los escombros de su propia casa.

“Quiero aprovechar este momento para agradecerle a ha toda la gente, de Estados Unidos han venido a verme, los vecinos se han portado tan bien conmigo, tal vez no nos conocíamos de nombre, pero sí de vista. Quiero agradecerle a todas las personas que han estado al pendiente de mi, que han venido a verme, me han hecho una oración no importa la congregación que sea todos somos hermanos, todos somos hijos de dios”, dijo.

Los vecinos gritaron Jojutla está de pie mientras la maquinaría pesada continuaba con la demolición de las casas y las escuelas, cuyo trabajo va continuar toda esta semana y después dependerá de los particulares reconstruir la zona comercial y del gobierno las zonas habitacionales.