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Hasta ahora el gobierno de Andrés Manuel López Obrador no ha hecho historia, como prometió en campaña, sino que ha convertido en un infierno el País, dijo en entrevista el poeta y activista Javier Sicilia, fundador del Movimiento por la Paz con Justicia y Dignidad (MPJD).
Agregó que los resultados en materia de seguridad de sus políticas públicas son los mismos que las pasadas administraciones.
“Los resultados de su política, que él resume en una política de abrazos y resume en una política de programas sociales, pues sus resultados son los mismos que la política de las balas, por eso yo insisto en que volvamos a los acuerdos fundamentales para tejer una política que no esté basada en los abrazos, ni en los balazos, sino en una política de fortaleza de estado, de construcción de fortaleza de estado.
“El tema no es cuántos balazos o cuántos abrazos hay que dar para acabar con esto, el tema, lo he dicho, repitiendo una frase de Jacobo Dayán, es ¿cuánto estado necesitamos para ponerle un alto al a violencia y poder hacer una justicia plena a esta nación”, expresó Sicilia en entrevista.
Luego de que el Presidente se negara a recibir a Javier Sicilia, quien anunció la realización de una marcha, el poeta dijo que insistirá y presionará al jefe del Ejecutivo federal para que cumpla su palabra de impulsar una agenda de justicia transicional que pasa por una comisión de la verdad.
“Veremos, presionaremos y le diremos, al final de cuentas, si no hacemos historia, como prometió, y lo único que hacemos es ahondar el infierno, la responsabilidad, la única responsabilidad va a estar de su lado por desgracia y podría no ser responsable del horror si camina en función de lo que él había prometido caminar y en función de esta unidad nacional, de este ‘juntos haremos historia’ que por el momento lo que estamos haciendo juntos es infierno y eso no es la vocación con la que llegó al poder”, comentó.
Criticó la respuesta que López Obrador dio a su carta pues aseguró que no toma en serio el tema.
Añadió que al despreciarlo, actúa de forma violenta.
“Otra vez, Presidente, tómesela en serio, yo no soy su enemigo, no somos sus enemigos y no nos pede calificar ni despreciar porque esas son formas de la violencia, que son contrarias a su espíritu evangélico, si somos evangélicos, en el buen sentido de la palabra, si entendemos el proceso, la profundidad del evangelio, el desprecio es una forma de la violencia que no tiene que ver con la caridad, que no tiene que ver con el amor, que no tiene que ver con la construcción de la justicia.
“Yo lamento mucho la banalización del Presidente frente a propuestas profundas y frente a acuerdos que les dio la espalda, ésa no era la estrategia que está implementando, que implementó, una estrategia absolutamente deshilachada, no fueron las estrategias que acordamos y que eran profundas y que buscaban una política de estado que tejiera la justicia, la verdad y la paz”, dijo.
