
Luego de que durante la marcha de este 8 de marzo algunas participantes pretendían pintar las paredes exteriores de la iglesia del Calvario, el director de Asuntos Religiosos del gobierno estatal, Luis Héctor Herrera, lamentó esa situación y expresó que ese tipo de manifestaciones deberían transcurrir en calma.
En este sentido, dijo entender el enojo y el coraje ante los feminicidios y otras formas de violencia contra las mujeres, pero insistió en que las protestas con destrozos a inmuebles no deben ocurrir.
Al respecto, fue a su paso por ese inmueble cuando un grupo del contingente que participaba en la marcha trató de rayar el recinto.
Sin embargo, algunos feligreses impidieron el acto y ello dio paso a un conato de enfrentamiento que sólo quedó en lo verbal.