
El ex fiscal Uriel Carmona Gándara no es localizable para que sea notificado de los resultados de la auditoría que realizó la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización (ESAF) por la presunta desviación de 300 millones de pesos.
El titular de la ESAF José Blas Cuevas Díaz, expreso que acuden a su domicilio ubicado en la colonia Amatitlán de esta ciudad, no lo encuentran o dicen que no está y tienen que volver a buscarlo.
Dijo que son más de 300 millones de pesos que no saben a dónde fueron destinados por parte del ex fiscal, varias de las observaciones son por presuntos desvíos de recursos en pago de nóminas, pago de honorarios, adquisición de equipos de cómputo.
Dijo que muchos pagos de honorarios no están justificados son más de 50 personas que no saben dónde están.
Añadió que ante la negativa de ser notificado se tendrá que dar vista a la fiscalía anticorrupción, las denuncias serán de manera individual.
La auditoría que finalizó fue del 2023 pero la 2024 es similar y se avanza en los años de su gestión al frente de la fiscalía.