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José Luis Rojas
Tras una larga comparecencia de varias horas en el Juzgado Cuarto de distrito, localizado en pleno centro de Cuernavaca, el día de ayer su titular dicto el auto de formal prisión a los tres ex policías judiciales, capturados el pasado sábado por policías municipales y militares de Cuautla en la Plaza Los Atrios, contra los presuntos se ejercito acción penal, por los delitos de violación a la ley Federal de Portación de Armas de Fuego, explosivos y cartuchería de uso exclusivo del ejercito.
Como se dio a conocer a los ahora sujetos a proceso se les capturo, el pasado sábado por la noche en la citada plaza, a bordo de un vehículo Audi placas776-XAA del Distrito Federal, portando armas de alto poder como rifles de asalto AK-47, pistolas escuadra más de cien cartuchos de diferentes calibre y dos granadas de fragmentación.
Al ser detenidos y consignados ante el agente del Ministerio Público Federa, se logró establecer que los tres presuntos utilizaban dos nombres el real y un alias para cometer sus fechorías de esta manera Fernando Rosas Gómez por igual se hacía llamar Iván Alfonso Flores Ramírez; Oscar Renato Heredia Canchola utilizaba el alias de Miguel Ángel Escamilla López y Alejandro Sánchez Avila el de Marco Alejandro Sánchez Aviles.
Fue la misma autoridad federal la que ejercito acción penal en contra de los tres expolicìas y por ello el juez cuarto de distrito ayer les dicto el auto de formal prisión, en medio de un numeroso operativo de resguardo y seguridad que abarco todo el primer cuadro de la ciudad en prevención de cualquier atentado, en el que participaron militares, federales y policías preventivos estatales, lo que incluso provocó la psicosis y la intranquilidad de la ciudadanía, así como diversos rumores, de enfrentamientos, balaceras y cateos en pleno centro, que por fortuna sólo fueron eso, rumores.
Cabe recordar Renato Heredia Canchola estuvo involucrado junto con Jorge Huesca Cortés y Humberto Alejandro Villanueva Mendoza, ambos policías ministeriales en activo en aquel entonces, de intentar secuestrar el 4 de octubre del año 2007, al empresario Servio Tulio Aranda de la Mora y de su esposa Nancy Alvillar Medina, según consta en la averiguación CT/5ª/3901/07
