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Trabajadores académicos de la Universidad Nacional Autónoma de México y del Estado de Morelos aguardan en la entrada de Cuernavaca en lo que se conoce como la Glorieta de la Paz para recibir a la Caravana por la Paz con Justicia y Dignidad que dirige sus pasos hacia el sur del país.
Los académicos aprovecharon el momento para manifestarse en contra de la violencia que se vive en México luego de que también hace unas horas se diera a conocer por parte de la Procuraduría de Justicia de Morelos que la investigadora Yadira Dávila apareció muerta muy cerca de las ruinas de Xochicalco. Lo anterior luego de que hace unas semanas se encontró el cadáver de una mujer y al practicarle las pruebas de ADN resultó ser la de la catedrática según la dependencia estatal.
El poeta, Javier Sicilia, desde su salida de la ciudad de México dijo que el objetivo de la Caravana al Sur es «la de pedir perdón a los miles de indígenas mexicanos, a los migrantes centroamericanos que han sido víctimas de las diferentes violencias, la violencia de los delincuentes, la violencia de las autoridades, y la violencia del propio Estado».
Refirió que la visita a Guatemala será para reafirmar la solidaridad con este país, «sobre todo para unirnos con su dolor, ya que allá también hay violencia, existe una responsabilidad de todos, no podemos dejarlos solos en su lucha de exigencia de justicia».
La Caravana de la Paz partió del Zócalo de la Ciudad de México con destino a Topilejo y luego a Cuernavaca, donde se efectuará un desfile con automóviles en La Paloma de la Paz, para después partir a Iguala, Guerrero.
“Somos un grupo de académicos que nos agrupamos para poder manifestarnos en contra de la violencia, la violencia ha llegado a límites que han tocado a investigadores, pero hay una violencia en general en el estado de Morelos (…) La violencia ha llegado a puntos de que nadie está a salvo, nos hemos vuelto vulnerable de asaltos, de secuestros de extorsiones, nuestra reflexión es que cada vez aumenta sin mirar gremios a los que pertenece uno, estudiantes ha sido violentados”, detalló Edgar Beltrán, investigador.
