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Los panteones hoy lucen coloridos, repletos de flores y veladoras, e incluso se escucha música al interior de ellos.
Y es que desde el pasado fin de semana incrementó la afluencia en los panteones del municipio de Cuernavaca, recibiendo hasta hoy más de 100 mil visitantes, pues en este 2 de noviembre los mexicanos conmemoran el día de sus fieles difuntos.
Tal es el caso de la señora Rosalía Francisca Leyva, que junto con su hijo, desde hace 40 años visita el panteón de La Leona para llevar flores y compañía a su hermana y ahijada.
“Le traigo flores blancas, rojas, flor de cempazuchitl tradicional y su veladora…Yo pienso que debemos recordarlos, nunca olvidarlos, y aunque unos dicen que el cuerpo se queda y el alma es la que se va, tenemos que recordarlos y nunca dejarlos…” así lo dijo la señora Rosalía Francisca.
Como ella cientos de personas continúan acudiendo a los cementerios cada 2 de noviembre con flores, veladoras, copal y los objetos personales que sus familiares disfrutaban en vida.
Muchos de los visitantes acudieron con suculentos platillos que había colocado en las ofrendas desde mole, pollo, arroz, frijoles, cervezas, tequila, o aquello que degustaban en vida quienes se han adelanto en el camino.
Parte de esta celebración data desde antes de la conquista de los españoles pues hay registros en los mayas, mixtecas, purépechas.
Para todos la muerte tiene un significado diferente para unos es temor, misterio para otros pasar a mejor vida, pero la realidad es que nadie escapa de ella.
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