SE DESTAPA CLOACA EN LA PROCURADURÍA GENERAL DE JUSTICIA

La detención ayer por la tarde del recién contratado, como así lo destaca la Procuraduría General de Justicia, como agente del Ministerio Público, Luis Brian Figueroa Fuentes, puso evidencia una vez más los parámetros, filtros y exámenes que se supone esta institución práctica a quienes contrata como servidores públicos en puestos tan delicados como este, al tiempo de que se fortalecen las sospechas de que más funcionarios y hasta policías ministeriales, podrían estar involucrados en una red criminal.
Hoy más que nunca con todo y que el titular de la PGJ, Pedro Luis Benitez Velez está más preocupado en consolidar su indignante como injusta jubilación y una prueba de ello son estos hechos, al igual que su secretario ejecutivo Agustín Pedraza Montes de Oca, ambos deben de ponerse a trabajar y llegar como lo dicen en el discurso hasta las últimas consecuencias, aunque hemos visto que a la fecha hay mandos ministeriales que no pasaron los exámenes de Control y Confianza y por ser gente del Procurador y de Agustín Pedraza no han sido removidos de sus cargos como si se hizo con Victor Guerrero Ruiz el ex director operativo de la zona metropolitana y como tampoco se ha hecho con otros mandos que están bajo sospecha de estar vinculados bandas de robacoches.
Pero ahora que prácticamente les reventó un escándalo más de presunta corrupción e impunidad a Pedro Luis y a Agustín Pedraza que hay que tener presente que obviamente esto no es resultado de una investigación interna ni de los exámenes de control y confianza, no, es resultado de un señalamiento de una víctima que reconoció su carro robado y utilizado en el secuestro de su propio hijo, es decir la PGJ ni cuenta se daba de lo que tenía en casa hasta que un ciudadano se lo señaló.
Por ello insistimos, la PGJ hoy de nueva cuenta esta en el “ojo del huracán”, “bajo sospecha”, pues no fue ni su procurador ni sus secretario ejecutivo ni sus más cercanos colaboradores los que pusieron al descubierto, esta red de corrupción, porque hay que destacar que además de que se debe investigar como es que el ahora detenido Luis Brian Figueroa fue aceptado como M.P. y quien lo dejó “pasar y a cambio de que”, por igual se tiene que ir más a fondo e investigar el no menos delicado punto de cómo es que un vehículo reportado como robado desde el mes de noviembre del año pasado y relacionado en un secuestro, este reporte no estaba hasta ayer en el sistema, lo que abre un abanico de sospechas, sobre presuntas complicidades y colusiones de otros funcionarios de la PGJ, pues a simple vista, dicho vehículo estaba legal y no robado, en una evidencia más de la corrupción e impunidad que se genera en esa institución. Escándalo que en muy mal momento por la jubilación del Procurador y su secretario ejecutivo, les vino reventar en las manos. No cree usted.

y para ello se requiere que el M.P. detenido ayer, haya tenido cómplices desde antes en la institución, para poder tener en su poder un vehículo relacionado en graves delitos, pero que “legalmente” no estaba robado. Una muestra por demás grave de corrupción e impunidad en la PGJ, que en mal momento viene a complicar la jubilación para el procurador y su secretario ejecutivo. Hace unos días trascendió a la opinión pública la intensión de Agustín Pedraza Montes de Oca, actual secretario ejecutivo del procurador Pedro Luis Benítez Vélez de jubilarse y aún cuando, dicha pretensión no ha sido aprobada por el Congreso del estado, como sí ya se hizo con la de su patrón Pedro Luis Benítez Vélez, bien vale la pena analizar algunas cuestiones, pues en mucho esta intención de Agustín Pedraza nos remite al vergonzoso caso del ex secretario de seguridad pública, Cesáreo Carbajal Guajardo, que intento lo mismo con documentos falsificados y a punto estuvo de ser denunciado y no consiguió nada.
De acuerdo a nuestros archivos, Agustín Pedraza nació en el mes de mayo de 1971, por lo que al mes de mayo del año pasado habría cumplido 40 años, lo que quiere decir que es muy joven aún para jubilarse, y es ahí donde surgen las dudas, pues de acuerdo a la ley se requieren como mínimo 20 años de servicio para solicitar este beneficio, pero sólo al 50 por ciento del salario del último cargo desempeñado.
Quienes laboran en el servicio público, no recuerdan de veinte años atrás a Agustín Pedraza como servidor público, por ello se impone que la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Congreso, ponga especial atención en todos los comprobantes y constantes de tareas desempeñadas por Agustín Pedraza, no vaya a ser que tratando de emular a Cesáreo Carvajal, haya conseguido constancias apócrifas, con tal y se disfrutar a costillas de todos los morelenses una jugosa jubilación de por vida.
Ante esto indigna que mientras cientos de modestos trabajadores con salarios de cuatro a seis mil pesos, no pueden jubilarse o consideran indigno e insultante el cobrar sin trabajar, personajes como Pedro Luis Benítez y Agustín Pedraza sin el menor remordimiento, quieren seguir viviendo a costillas del pueblo.