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En la comunidad de Santa Rosa 30 en el municipio de Tlaltizapán, un centenar de de feligreses ayer por la tarde, exigieron la remoción del párroco José Luis Álvarez Ramírez a quien acusan de sostener un amasiato con una mujer casada violando las normas del celibato que marca la iglesia católica.
El escándalo estalló en medio de un clima de tensión donde se vieron involucradas más de 200 personas que se indignaron cuando en la puerta de la iglesia una mujer tomó la palabra para acusar al padre de este templo, José Luis Álvarez Ramírez, de quien aseguró, sostiene relaciones sexuales con una mujer casada de esta comunidad de Santa Rosa 30; otras tantas personas de inmediato salieron en la defensa del sacerdote a quien exigían que aclarara la situación y él representante de la iglesia siempre se mantuvo dentro del recinto y solo dijo a su favor que era una difamación de parte del marido, sin embargo el marido ofendido, aseguró que el sacerdote sí sostiene relaciones sexuales no solo con su esposa, sino que el sacerdote José Luis Álvarez Ramírez, tiene otra mujer en Ahuatepec y con ella tiene tres hijos.
Este asunto ya fue denunciado en la catedral de Cuernavaca donde se encuentra el nuevo Obispo, pero según el marido ofendido, entre curas se solapan y las cosas no avanzan; finalmente hay que señalar que la esposa del feligres ofendido se gana la vida dando masajes y uno de sus clientes, es el sacerdote José Luis Álvarez Ramírez.
