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Estafadores y ladrones, podrían estar utilizando las instalaciones de la tienda de auto servicio, Bodega Aurrera Plaza Chapultepec, para engatusar incautos y robarles su dinero.
Lo anterior salió a relucir tras la denuncia de un comerciante de “La Glorieta Chapultepec”, luego de que un sujeto que se dijo empleado de Aurrera engaño a su trabajadora con el pretexto de que le cambiaría cuatro mil pesos de billetes por monedas, para que tuvieran cambio para sus clientes.
Conforme a la denuncia penal SC01/8878/2013, iniciada por Miriam Mejía Fuentes, la tarde de ayer miércoles, llegó al negocio de su patrón, localizado en la Glorieta Chapultepec, un sujeto que se identifico como empleado de Bodega Aurrera, y le ofreció el cambio.
El sujeto a decir de la denunciante, argumento que ya por la mañana, “había hablado con su patrón, habiendo quedado de acuerdo con él, en que él le avisaría, cuando hubiera en Aurrera suficiente cambio, para canjearlo por billetes, en el entendido que debería ser a la hora indicada, antes de que cerraran la bóveda, porque si no ya no podría hacerse la transacción”.
De esta manera la empleada Miriam Mejía, acompañó al supuesto empleado de Bodega Aurrera Plaza Chapultepec, hasta el interior de la tienda, llevando ella los cuatro mil pesos, en billetes, para cambiarlos por las monedas.
Ya estando en el interior de la tienda, el supuesto trabajador de Bodega Aurrera, le pidió el dinero a la empleada,“para traerle las monedas” y se fue más adentro de la tienda, pasando por un área restringida, es decir sólo para empleados, pero ya nunca regreso y huyó por otro lado, con el dinero.
Tras el robo la empleada y su patrona se entrevistaron con la gerente, Carmen González, el mismo miércoles por la tarde, y tras informarle lo que había ocurrido dentro de la tienda, ella dijo estar en la mejor disposición, de enseñarles hoy jueves a las ocho de la mañana, el video del interior de la tienda, para descubrir si el ladrón era o no empleado de la tienda y proceder en consecuencia, pero llegada la hora, la gerente se negó a hacerlo, argumentando “políticas de la empresa”, pero aseguro que “ella ya había visto el video y que no se trataba de ningún trabajador de la tienda”.
Por otra parte la gerente dijo a la parte afectada, tendría que solicitar por escrito al corporativo de “Bodega Aurrera”, el citado video, pero cuando le pidieron la dirección y demás datos para hacerlo, pretextando que tenía mucho trabajo, pues había “inventario”, se negó a proporcionarlos, pareciendo encubrir l ladrón, fortaleciendo así las sospechas de que podría tratarse un empleado de la tienda o conocido de la gerente, que se dedica a robar incautos, con la complicidad de sus jefes.
