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El encargado de despacho de la Fiscalía General del Estado, Javier Pérez Durón, confirmó que 105 cuerpos fueron enterrados posiblemente de manera irregular en dos fosas comunes del municipio de Cuautla, por lo que ya iniciaron investigaciones en contra de varios funcionarios de la Fiscalía de la Región Oriente.
En días pasados, María Concepción Hernández, madre de Oliver Wenceslao Navarrete Hernández quien fue secuestrado y asesinado en mayo del 2013, reveló que al igual que a su hijo, 149 personas más fueron enterradas de forma clandestina por las autoridades en un predio habilitado como fosa común en la comunidad indígena de Tetelcingo, municipio de Cuautla.
Cuestionado al respecto, Javier Pérez Durón confirmó el hecho, sin embargo aclaró que no se trata de 150 si no de 105 cuerpos los que se encuentran en dos fosas comunes, por lo que iniciaron las investigaciones que contemplan a varios funcionarios de la Fiscalía regional para determinar si se actuó de manera irregular con la inhumación de estos cuerpos.
“Hablan de 150 pero nosotros tenemos localizados 105 cuerpos. Tenemos dos fosas que se realizaron en ese momento, es un hecho de hace aproximadamente dos o tres años, nosotros no vamos a solapar a nadie y estamos en la integración de las investigaciones, estamos checando las carpetas, hay un procedimiento en visitadurías, yo no puedo prejuzgar ahorita si estuvo bien hecho o si estuvo mal”, dijo.
Sin especificar los nombres de quienes están bajo investigación, aclaró que van desde Servicios Periciales, agentes del Ministerio Público y toda la gente que tuvo que ver en el proceso, incluso el propio titular de la Fiscalía Regional en caso de que haya tenido injerencia, al tiempo de advertir que no van a solapar a nadie.
