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A consecuencia de los trabajos del paso Express, la tarde de este lunes a la altura del kilometro 89 más cien, en el carril norte sur, un talud y el muro de una residencia se vinieron abajo además de que se provocaron cuantiosos daños en el condominio residencial «Ziel 11», localizado en la calle Osa Menor número 11 de Jardines de Cuernavaca, a consecuencia, a decir de los afectados, de que «no se hicieron los estudios topográficos ni de mecánica del suelo y se ha dejado que la constructora haga lo que quiera».
Alrededor de las 16.00 horas se alertó al personal de Protección Civil y de seguridad de la Cuernavaca, pues inicialmente se dijo que se había desplomado una residencia en dicho lugar, sin embargo posteriormente Franky Mondragón, director de PC, al hacer una inspección del lugar, puso en claro que «únicamente se había venido abajo el muro y el paredón de una casa, pero sin mayores daños ni consecuencias, pues incluso el conductor de la máquina retroexcavadora había resultado ileso».
En contraste las personas afectadas en sus propiedades, exigieron a las autoridades federales y estatales que le pongan un alto y supervisen a la constructora del «Paso Express», pues insistieron en que la han dejado que haga su obra como se le da la gana, afectando a los vecinos de la zona.
Incluso señalaron que «a nosotros nos dijo el que nos vendió que teníamos de tres a seis metros de margen de nuestro muro al derecho de vía de la carretera y ahora resulta que están excavando al ras de nuestras bardas y lo peor como no hicieron los estudios del suelo obligados, sólo se pusieron a rascar, «nos salen, primero con que encontraron fisuras y luego nos enteramos por otro lado que no son fisuras, que son grietas subterráneas y por ello al seguir rascando con sus maquinas se socaba el suelo y vienen los derrumbes y daños en nuestras propiedades».
Para colmo señalaron los afectados que «unos a otros se culpan de lo que nos pasa, simplemente hoy Miguel Ángel Murillo que se dijo encargado de la obra por parte de la SCT, al ser cuestionado por nosotros, no argumentó que el responsable es el residente de obra Josué Robles, pero esta cuando le preguntamos no dijo que es Miguel Ángel Murillo y así se la pasan echandose la bolita unos a otros».
Ante esta situación, los afectados que estimaron que a los largo de la obra del «Paso Express», ya una veintena de casas dañadas por estas excavaciones, exigieron que los constructores den la cara, asuman su responsabilidad y paguen todos los daños que han causado en sus propiedades.
