SUSPENDEN PAGO DE BONO A POLICÍAS MINISTERIALES

Aproximadamente un centenar de elementos de la Policía Ministerial, están sin cobrar su bono, denominado concepto 40, que se supone asigna la Federación a todos y cada uno de los agentes que están al corriente con sus exámenes de Control y Confianza, sin que haya autoridad alguna en la Procuraduría General de Justicia y la misma corporación que les pueda informar de la razón de la suspensión de este pago, que muchos sospechan es “jineteo” de lana por parte de los responsables de la PGJ.
Explicaron algunos de los quejosos de manera anónima ante el temor a las represalias de sus jefes, que hay casos que desde la última quincena de noviembre, no les pagan este bono que para los policías representa un apoyo extra de alrededor de mil 200 pesos al mes, luego de que la gran mayoría ya presentaron sus exámenes, que aceptaron no saber ningún resultado, pero destacaron que el dinero del bono ya les suspendido sin explicación alguna, cuando recalcaron que si algunos no cumplieron en tiempo con estos exámenes es porque el burocratismo o la incapacidad de quienes los aplican no lo permitieron y eso no es culpa de los policías.
En contraste señalan, que como evidente prueba de privilegios y componendas, en la corporación solapadas por la Procuraduría, el ex Coordinador General de la Policía Ministerial, José Robles Quintana que fue removido del cargo por los insistentes rumores de que no paso los exámenes, en la ciudad de México y los pobres resultados obtenidos, fue colocado prácticamente como becado, en la Dirección de Planeación y Operaciones Tácticas de la PM, con su salario completo, vehículo oficial, cuatro escoltas, y sin hacer nada tal y como lo hacía su antecesor Héctor Alvizu Hernández, mientras que a los policías que si trabajan y arriesgan su vida en las calles, tal parece que buscan pagarles lo menos posible, pues prácticamente no tienen un mando que los respalde ya que el actual coordinador Antonio Amado Narro Flores, no quiere saber nada de ellos, y todo lo acuerda con sus ex compañeros, cayendo en el absurdo y la ilegalidad y usurpación de funciones, de tener que informar a los federales que los interceptan en las carreteras de los auxilios a que acuden, como si ellos fueran sus mandos.