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José Luis Rojas.
Dos elementos de la Policía Municipal de Cuernavaca, de la patrulla 02871, de nombres Víctor Diego Navarrete de 30 años de edad y Elías Rea Avíles de 40 años, fueron ejecutados por presuntos sicarios del crimen organizado que se dice viajaban en tres vehículos, un Ford Topaz, un Jetta y un Wolkswagen Bora, quienes sin miramientos abrieron fuego contra los uniformados, cuando estos se disponían a cubrir un auxilio, del hallazgo de un cadáver en el canal de riego del ejido de Acapantzingo.
Fue aproximadamente a las 9.15 horas de hoy cuando los uniformados al ir circulando por la avenida Heroico Colegio Militar, muy cerca de sus instalaciones en la Secretaría de Protección y Auxilio Ciudadano, enfilaron hacia la carretera a Tepoztlán para tomar el libramiento con rumbo a Acapantzingo, pero tras pasar la glorieta de “ La Paloma de la Paz ” y cruzar por la avenida Domingo Diez, justo frente a unos negocios denominados “Cuernavolks y Jorges”, fueron alcanzados por los tres vehículos en que viajaban los asesinos, y los rafaguearon, dándoles muerte instantáneamente.
Los uniformados fueron sorprendidos por los sicarios, y no pudieron intentar siquiera sacar sus armas para defenderse y ahí quedaron sin vida, mientras que sus victimarios se presume que huyeron con rumbo a Tepoztlán, sin que nadie pudiera hacer algo para recabar indicios que ayudaran a la policía a saber el rumbo que tomaron.
Por otra parte se logro saber que metros adelante en otra patrulla viajaba el Director de la Policía Municipal , Juan Bosco Castañeda, quien por igual acudía al auxilio al Ejido de Acapantzingo, y al conocer de los hechos se regreso a tratar de apoyar a sus compañeros, pero la ejecución ya se había consumado.
En el lugar de los hechos, minutos después los peritos criminalistas encontraron decenas de cartuchos percutidos de armas de grueso calibre, e iniciaron las investigaciones de campo en busca de indicios que puedan ayudar a esclarecer los hechos, pero esto ya como mera rutina, pues como es del dominio público, de las más de 120 ejecuciones se que tienen registradas en el estado en lo que va del año, ninguna ha sido resuelta por la Procuraduría local, y por otra parte al encontrar indicios de que está relacionado el crimen organizado, turna de inmediato estos casos a la Procuraduría General de la República donde tampoco se sabe que haya avances en las investigaciones.
Esta ejecución policías municipales de Cuernavaca, de inmediato provocó una intensa movilización policíaca, la presencia de elementos del Ejército y varios operativos más, pero todos fueron infructuosos, los sicarios lograron escapar, una vez más.
Dentro de las primeras investigaciones trascendió que una de las víctimas, el policía municipal de Cuernavaca, Víctor Diego, tenía su domicilio en el municipio de Emiliano Zapata, por lo que se comenzó a especular, si el habría sido el objeto de la ejecución, por una posible relación con hechos registrados, apenas el viernes de la semana pasada, precisamente en ese lugar.
De la otra víctima se informó que este tuvo su domicilio en la calle Ahuatepec de la colonia Antonio Barona.
